Diciembre y enero se caracterizan no solo por tener un clima frío, sino también son los meses que están llenos de nostalgia, unión familiar y romanticismo. En estos tiempos recordamos cuando éramos pequeños, cuando nuestras familias se reunían en navidad para cenar, abrir regalos y pasarla divertidamente con nuestros seres queridos.

Si nosotros nos ponemos nostálgicos, imaginen el cómo se sienten nuestros adultos mayores: recordar su niñez, su juventud, el cómo los tiempos han cambiado, cuando crearon a su familia, cuando sus hijos tuvieron hijos, y si es que ahora sus nietos también tienen hijos. Es una ola de recuerdos que podemos disfrutar con ellos estando a su lado. Estos recuerdos pueden ser una mezcla de alegría y nostalgia, ya que muchas veces traen consigo memorias de personas que ya no están, de tradiciones que han cambiado con el tiempo y de la evolución de la sociedad y la tecnología. Por eso, es importante acompañarlos, hacerlos sentir amados y parte fundamental de la familia.

Por eso, en estas fechas, te recomendamos pases el más tiempo posible con los más grandes de la familia. Recuerda que pasar tiempo de calidad con ellos, también es una manera de cuidarlos y expresarles cuánto los amamos. Así que aquí te dejamos algunas actividades sencillas que puedes realizar con tus abuelitos:

1. Saca el álbum fotográfico. Seguramente nuestros adultos mayores tienen uno que otro álbum de fotografías guardado en algún lugar. Pídele que te enseñe las fotografías y que te cuente lo que sucedió cuando la tomaron si es que aún lo recuerda. Incluso si no lo hace, seguramente se le ocurrirá alguna historia divertida que los hará disfrutar el momento. Además, esta actividad puede fortalecer el vínculo familiar, ya que muchas veces, en las fotos aparecen personas que los nietos o bisnietos no conocen, y esto puede ser una oportunidad perfecta para transmitir la historia familiar de generación en generación. También pueden aprovechar para digitalizar las fotos y conservarlas en un formato más seguro y duradero, asegurando que estos recuerdos perduren en el tiempo.
   
   
2. Elije una película. Pregúntale a tu familiar mayor qué película era su favorita e intenta encontrarla en algún servicio de streaming. Mírenla juntos y deja que te cuente historias de cómo fue la primera vez que la vio, quién era su actor favorito o si alguna vez le pasó algo similar a la trama de la película. Este momento no solo les permitirá compartir una experiencia entretenida, sino que también puede ser una oportunidad para comparar el cine de antes con el cine actual y reflexionar sobre los cambios en la sociedad, la tecnología y la forma en que se cuentan las historias. Para hacerlo más especial, pueden acompañar la película con una merienda casera, convirtiéndolo en un momento acogedor e inolvidable.
   
   
3. Hora de snacks. Es muy común que, sobre todo en nuestras abuelitas, les guste cocinar y tengan las recetas de la familia que quedan deliciosas; así que no te cohíbas en preguntarle por alguna y junto con ella, pónganse a cocinar algunos de esos postres o comidas que tan ricas son. Además de ser una actividad entretenida, también es una forma de preservar la tradición culinaria familiar. Muchas recetas no están escritas y solo existen en la memoria de nuestros abuelitos, por lo que este es el momento perfecto para documentarlas y asegurarse de que se transmitan a las siguientes generaciones. Cocinar juntos no solo es una actividad placentera, sino que también es una forma de fortalecer la relación y compartir risas y recuerdos mientras preparan algo delicioso.
   
   
4. Dibujo, pintura y rompecabezas. Toma la oportunidad de pintar algún paisaje, dibujar alguna ciudad o de armar un rompecabezas con nuestro abuelito. Es una forma en que pueden pasar el tiempo juntos haciendo algo tranquilo, y la conversación no faltará. Siempre habrá alguna historia divertida o interesante que nos podrá contar mientras pasamos tiempo de calidad con ellos. Además, este tipo de actividades ayudan a mantener la mente activa, mejoran la concentración y fomentan la creatividad. Para los adultos mayores, mantener la mente ocupada con actividades como estas puede ayudar a retrasar el deterioro cognitivo y mejorar su bienestar emocional. Además, podrían incluso enmarcar el dibujo o la pintura para guardarlo como un recuerdo especial de ese momento compartido.
   
   
5. Un corto paseo. Invita a tu abuelito o abuelita a salir a caminar un rato. Vayan a un lugar de compras o a comer un postre. Esto no solamente te dará tiempo de calidad con ellos, también les ayudará a hacer un poco de ejercicio y mantener la movilidad de sus cuerpos. No olvides que deben ir bien abrigados, pues el clima en estas fechas puede ser de temperaturas bastante bajas. Un paseo también es una excelente oportunidad para que respiren aire fresco, disfruten del entorno y recuerden lugares que tal vez frecuentaban en su juventud. A veces, una simple caminata por un parque o una visita a una plaza puede traerles gratos recuerdos y hacerlos sentir felices y acompañados. Si es posible, aprovecha estos paseos para capturar fotos juntos y crear nuevos recuerdos.
   
   

Recuerda que la mente de nuestros abuelitos está llena de recuerdos e historias maravillosas de los tiempos en los que eran jóvenes. Ellos tuvieron una vida muy diferente a la forma en que ahora se vive y el mundo no era igual a como nos toca vivirlo en estos tiempos. Deja que te cuenten sus historias, que te hablen de la ciudad donde nacieron, sus pasatiempos de jóvenes, qué lugares les gustaba visitar. Sobre todo, en estas fechas que vemos por todos lados familias unidas, no debemos descuidarlos. Ellos siempre han estado para nosotros y nosotros también debemos estar para ellos.

Y si nuestros queridos adultos mayores no viven cerca, qué más que un pequeño viaje para visitarlos y hacer todas las actividades que te mencionamos. Incluso, es importante visitarlos si se encuentran en algún asilo o casa de retiro, ya que, por las fechas, los familiares suelen visitarlos más y si ven que los otros residentes están siendo visitados por sus familiares, pueden sentirse tristes de no tener la misma atención. Lo único que queremos es que ellos estén felices.

Pasar el tiempo con nuestros adultos mayores nos ayudará no solo a que ellos se sientan amados, a pasar tiempo de calidad, a cuidarlos, a protegerlos, también nos ayudará a conocer un poco más sobre nuestra familia, sobre de dónde venimos, sobre la forma en que nos criaron. Hablar con nuestros adultos mayores nos da enseñanzas de vida y de amor, y podemos conocer grandes y sorprendentes historias por la vida que han tenido y las cosas que han vivido. Podemos tener una percepción más amplia de nuestra familia, del mundo y de la diferencia entre la vida de ahora y la vida de antes.

Pasemos más tiempo con nuestros adultos mayores, hagámosles saber cuánto los amamos y los cuidamos.